Enfoque de toma de decisiones que se basa en datos y evidencia para tomar decisiones. Las decisiones no se toman en base a la intuición o el instinto, sino más bien en el análisis de datos.
La toma de decisiones basada en datos se está volviendo cada vez más popular a medida que las empresas se dan cuenta del valor de utilizar los datos para tomar mejores decisiones.
Los datos se pueden utilizar para identificar tendencias, patrones y relaciones que pueden ayudar a las empresas a tomar decisiones más informadas.
Hay muchos beneficios de utilizar un enfoque basado en datos para la toma de decisiones. Por ejemplo, las decisiones basadas en datos pueden ser:
Más precisas: las decisiones basadas en datos se basan en evidencia, por lo que es más probable que sean precisas que las decisiones tomadas en base a la intuición o el instinto.
Más eficientes: las decisiones basadas en datos se pueden tomar más rápidamente y fácilmente que las decisiones tomadas por un comité o por una sola persona.
Más objetivas: las decisiones basadas en datos no están influenciadas por sesgos personales u opiniones, por lo que son más objetivas que las decisiones tomadas por una sola persona.
También hay algunos desafíos asociados con el uso de un enfoque basado en datos para la toma de decisiones. Por ejemplo, puede ser difícil recopilar y analizar los datos que son necesarios para tomar decisiones informadas.
Además, las decisiones basadas en datos pueden ser difíciles de explicar a los interesados que no están familiarizados con el análisis de datos.
En general, la toma de decisiones basada en datos es una herramienta valiosa que puede ayudar a las empresas a tomar mejores decisiones.
Sin embargo, es importante ser consciente de los desafíos asociados con este enfoque antes de utilizarlo.
